Otro lunes más seguimos con nuestro estudio de las fotografías y en esta semana volvemos a hablar de los modos de escena. Anteriormente, ya estuvimos viendo como funcionaba el modo escena paisaje y vimos que nuestras cámaras traían varios tipos de escenas para diferentes momentos fotográficos. Hoy nos detendremos en el modo macro.
Lo primero para el que no conozca lo que significa macro que no se asuste es muy simple. Hablamos de macro fotografía cuando el motivo fotografiado es igual o de menos tamaño que el del medio de reproducción. Esta definición se basa en la diferencia que existía entre el objeto y la película. Hoy en día la relación sería con el sensor.
La macro fotografía se utiliza sobre todo para uso científico. Pues gracias a imágenes de este tipo se pueden estudiar elementos muy pequeños, que de otro modo no serían visibles para nosotros. No obstante, este tipo de fotografías es muy común también en los fotógrafos de flores, que sin llegar a ser una diferencia de tamaño tan grande también se las considera fotografías macro.
No obstante, la macro fotografía no es simplemente fotografiar algo pequeño pero suele aceptarse este término cuando realizamos una foto detalle de algo de dimensiones mínimas. Aunque para hacer estas imágenes los profesionales utilicen una serie de lentes de aproximación para lograrlas, este automatismo de la cámara nos permite jugar un poco con efectos similares.
¿Cómo funciona el modo macro? En este tipo de fotografías, la profundidad de campo es muy limitada y esto ocurre porque suele ser necesario abrir el diafragma y cuanto más se abre menos profundidad de campo dispondremos. A demás si le añadimos que para fotografiar algo pequeño por norma tenemos que acercarnos más, esto influye aún más en la poca profundidad de campo. Por ello, usando este modo de escena logramos reducir las posibles vibraciones y problemas de enfoque comunes en estas fotografías.
No es la respuesta para todas nuestras fotografías de detalles, pero si os gusta esas imágenes en las que un pequeño elemento esta enfocado y el resto no, os gustará usarla. Esta herramienta es la que utilicé en la fotografía que acompaña a estas palabras, mi idea inicial era enfocar una pequeña flor que cayó de un árbol mientras ojeaba una revista. Pero la distancia entre cámara y flor me dificultaron la tarea. No obstante, al percatarme del texto de esta página de la revista que aparece dentro de foco, re interprete la escena. Ya que el texto “5 orgasmos” resultaba tan llamativo que la imagen adquirió un carácter propio.
Así que probar este modo de escena, puede que os encontréis con alguna sorpresa como me pasó a mí o que simplemente comencéis a adorar las cosas pequeñas. Sin duda, la práctica hará la perfección y seguro que podréis conseguir fotografías de lo más curiosas. A demás, ahora incluso puede que encontremos esta función en nuestro teléfono móvil como ocurre con el iPhone que nos aporta la función macro, así que no hay escusas y probadla.
¿Os gustan este tipo de imágenes? ¿Pensáis que la foto huera estado mejor con la flor enfocada? Ya sabéis es vuestro momento de exponernos vuestras ideas o dudas a continuación.