Bill Gates renunció a su puesto al frente de Microsoft en el año 2000, y en el 2008 prácticamente dejó de lado todas las tareas relacionadas que aún realizaba, para centrarse en su fundación filantrópica. Eso no ha provocado que su fortuna haya decrecido en ningún modo durante este tiempo. Su sucesor fue Steve Ballmer, que va a abandonar la empresa en un plazo más o menos breve, y al que ya se le está buscando un sucesor. Como prueba de que Gates aún juega un papel importante en la compañía que fundó nos encontramos con que forma parte del comité designado para escoger al nuevo directivo jefe de la firma de Redmond.
Pues bien, tres grandes inversores de la multinacional quieren que Gates abandone su puesto actual como presidente, que realmente resulta más bien honorífico. Consideran que su permanencia dificultaría la adopción de nuevas estrategias y limitaría al nuevo CEO a la hora de realizar cambios. Este grupo posee el 5% de las acciones de Microsoft, y también está preocupado porque, a pesar del perfil discreto del fundador, cree que su influencia sobre la marcha de la empresa se ha vuelto demasiado grande en proporción a las acciones que tiene (el 4,5% del total, el mayor propietario individual). Además, Bill Gates está vendiendo progresivamente sus participaciones a un ritmo planeado, por lo que en 2018 no contará ya con ninguna.
La identidad de los tres inversores no se ha revelado, porque estas negociaciones eran supuestamente “privadas”. Deben lograr convencer al consejo de administración para que sus intenciones se hagan realidad pero, por lo de ahora, no hay pruebas que apunten a que lo vayan a conseguir. En una compañía cambiando su orientación hacia dispositivos como tablets, smartphones y consolas, tal vez una renovación absoluta no represente una buena idea. Veo positivo dejar que entre sangre nueva, pero debe quedar alguna figura de referencia y que conozca a fondo el negocio, como es el caso de Bill Gates.
¿Qué opinas tú? ¿Crees que el directivo sobra en su propia compañía, o que debe mantenerse en su puesto?