Hace un tiempo ya hablamos de la fotografía arquitectónica y de cómo existe equipo específico para la realización profesional de este tipo de imágenes. Sin embargo, hoy vamos a dejar a un lado la fotografía arquitectónica más técnica y nos vamos a centrar en otorgarle vida a las edificaciones.
Si no se trata de una fotografía simplemente descriptiva, la fotografía arquitectónica puede ser también un modo de expresión artística. Podemos crear historias en que los personajes retratados sean justamente edificios. Por ello algunas de las típicas normas que cumplimos cuando realizamos retratos pasan a ser válidas en este tipo de imágenes.
Por ejemplo en la fotografía que tenemos en este artículo, podemos interpretar la fachada de este conocido edificio como si fuera un rostro. Por lo tanto cumpliríamos la norma de la mirada, en la que se deja espacio hacia donde se dirige la mirada, en este caso los ventanales de la Catedral de Santiago de Compostela.
Además de dar carácter de persona a este templo, la ligera diagonal que dibuja la fachada no solo le aporta dinamismo, sino que ayuda a lograr fijar la idea de que este edificio mira hacia el cielo. Una idea que sin duda encontramos en numerosas catedrales o edificaciones religiosas. Donde la arquitectura se mezcla con el misticismo de la religión, buscando la unión entre la tierra y el cielo.
Los arquitectos son conscientes de la vida que los edificios tienen, por ello crean esos diseños tan interesantes, para que el resto nos demos cuenta de la vida que en ellos encierran. Por lo tanto no dudéis en buscar ese punto de vida en los edificios y ver algo más tras la arquitectura.
¿Soléis realizar fotografías a edificios? ¿Buscáis elementos curiosos dentro de las construcciones que fotografiáis?
A mi también me gusta sacarle fotos a los edificios, aunque todavía no se me da muy bien