El caso de Valeria Lukyanova, la Barbie de carne y hueso, levantó mucho interés, y hoy conocemos el de Justin Jedlica. Como se aprecia en la foto, es muy aficionado a las operaciones de cirugía estética: ha pasado por 149 intervenciones, si bien “sólo” 19 las considera mayores. Empezó a los 18 años, a pesar de no contar con el visto bueno de sus padres, con el objetivo de escapar de una vida que encontraba vulgar. Y cree que lo ha conseguido, porque llama la atención en Nueva York, y diversos medios de comunicación se han interesado por él.
No considera que imite al muñeco Ken (ese apodo se lo pusieron en un programa de televisión), sino que sus influencias tienen origen en la cultura manga japonesa. Ha gastado 170.000 dólares en operaciones, como la de la nariz o la de los bíceps. Pero no cree que resulte una cifra excesiva, ya que se priva de otros lujos como viajes o coches. Además, últimamente su peculiar aspecto le permite obtener ingresos. Pero, sobre todo, las operaciones le otorgan una confianza que dice que resulta básica para el día a día. Jedlica se ha casado en julio, tras una relación de cinco años, y a su pareja le agrada su aspecto.
Por otro lado, no le cae demasiado bien “la Barbie de carne y hueso”, sobre todo por su rechazo al mestizaje, que él ve como una actitud racista. Lo cierto es que Jedlica se declara feliz, a pesar de la oposición que encontró cuando empezó su transformación. No considera que tenga un problema de ningún tipo, y se encuentra satisfecho con la fama y el acceso a una vida estilosa que ha conseguido. Al igual que Lukyanova, ve su futuro en la industria del entretenimiento estadounidense, en la que ya ha dado sus primeros pasos.
¿Qué te parece el aspecto del “Ken real”? ¿Te da un poco de miedo, o lo encuentras atractivo?
Jajajajja por qué un chaval joven como este no se esfuerza un poco, se levanta de ese sofá se va al gimnasio a que se le ponga un cuerpo de persona normal, y no de adefesio de plástico… qué aberración! ¡Er mundo etá locco!
[…] hemos visto otras transformaciones extremas, como la del hombre que quiere convertirse en un muñeco Ken, pero parece que nunca dejamos de sorprendernos con lo que encontramos en la red de redes. Desde […]