Dos ingenieros de electrónica de la Universidad de Michigan, Ted Norris and Zhaohui Zhong, acaban de publicar hace unas semanas un artículo en la revista Nature sobre el desarrollo de un pequeño fotodetector de grafeno con un rango de absorción lumínica amplísimo, permitiendo captar los rangos de espectro lumínicos que no son visibles para el ojo humano. El dispositivo es del tamaño de una uña y, según palabras de uno de los investigadores, en un futuro podría llegar a integrarse en productos tan pequeños como las lentillas, dotándolas con funcionalidades de visión nocturna.
Como publicábamos en Xombit hace unos días, el grafeno está cada vez más cerca de ser comercializado a gran escala, y no pasa ni una sola semana en la que no veamos algún tipo de avance, descubrimiento o prototipo fabricado con este material.
Por otro lado, también se están produciendo muchísimos avances en la miniaturización de la tecnología para integrarla en productos tan pequeños como unas lentillas.
El equipo de investigación dirigido por Norris y Zhong ha combinado estos dos mundos, la miniaturización de la tecnología y las propiedades asombrosas del grafeno, para desarrollar un mini-dispositivo que permitirá captar prácticamente todo el espectro de la luz, pudiendo dar lugar a nuevos dispositivos de visión nocturna mucho más pequeños y manejables que los que existen en la actualidad. Estos ingenieros han declarado que aún faltan mejoras en la sensibilidad y rendimiento de esta tecnología para que podamos ver productos tales como lentillas de visión nocturna, pero que podrían ser una realidad en un futuro próximo (y una gran ayuda para sectores como el del armamento militar).
A pesar de que falten algunos años para poder materializar este prometedor avance, en la actualidad ya podemos encontrarnos un modelo de lentillas que, aunque no son de visión nocturna, permiten ver la luz infrarroja, y que han causado algún quebradero de cabeza a un casino de la Costa Azul francesa.
