El asco es una sensación muy importante, ya que nos aleja de patógenos que nos harían daño, y las bacterias se aprovechan de ella para comerse los alimentos podridos. Pero… ¿sentir asco al ver a dos personas expresar su amor? Resulta más extraño, pero es algo que ocurre. Tal vez este sentimiento haya evolucionado para que evitemos los comportamientos socialmente inaceptables. La realidad es que no lo sabemos, y la ciencia no puede explicar qué es lo que causa ese desagrado entre ciertas personas al ver a dos homosexuales juntos. Pero se está investigando, y algunos de los hallazgos resultan de lo más interesantes.
Los conocemos gracias a National Journal: las personas con tendencias conservadoras son más fáciles de desagradar, y un trabajo del 2011 lo demostraba midiendo sus reacciones cutáneas y por al asco que les daba una persona comiendo gusanos. Y este efecto se daba contra los homosexuales y el matrimonio igualitario, pero también con otros temas, como los contenidos para adultos. Más curioso aun fue un experimento en el que se preguntó a dos grupos de personas por temas como el matrimonio igualitario, la relaciones antes del matrimonio o el entretenimiento audiovisual para adultos.
Uno de los grupos respondía las preguntas en una sala con un olor desagradable, y el otro en una normal. Y se comprobó que los primeros mostraban opiniones más conservadoras… en estos temas delicados, pero no en otros como la reducción de los impuestos o la inmigración. ¿Qué podemos concluir? En mi opinión, que el ser humano resulta más complejo de lo que creemos, y que apenas nos estamos empezando a comprender. Pero también que nuestro entorno y nuestros genes tienen impacto en las cosas más inesperadas. En cualquier caso, este campo está en un estado embrionario, y todavía queda mucho por investigar.
¿Qué opinas de este asunto? ¿Una curiosidad sin más, como el estudio de la memoria de los peces, o un tema muy interesante?
Imagen | Homo Eяectus