Hace tiempo ya comentamos que el estándar micro USB es realmente útil: dejó de lado la enorme variedad de cargadores de móviles en el mercado, de forma que ahora resulta fácil encontrar uno compatible en cualquier sitio. Excepto si tiene un iPhone, ya que Apple siempre ha sido rebelde. Pues bien, ahora se presenta una alternativa al Lightning de la marca de la manzana, pero que será apoyada por la mayor parte de la industria, especialmente sabiendo que las autoridades europeas quieren que haya un estándar en este campo. Así que el futuro se llama USB Type-C.
Sabemos gracias a Xataka que ya se ha finalizado el diseño de este conector. Las malas noticias son que necesitamos nuevos cables, y que el tamaño de la clavija no se reduce respecto a micro USB. Pero ganamos en comodidad, dado que ahora se puede conectar el cable en cualquier sentido, y que los conectores de ambos extremos resultan idénticos. No terminan ahí las ventajas, ya que el estándar sirve para móviles, pero es suficientemente robusto para integrarse en tabletas y portátiles. Será capaz de transmitir datos a 10 Gbps (cumple con USB 3.1). Por otro lado, ofrece hasta 100 watios de potencia, así que podemos estar ante el cargador universal para ordenadores.
El cable se ha diseñado para soportar futuras actualizaciones en el formato, y ya se habla de sus posibilidades para transmitir vídeo, aunque aún no se han ofrecido muchos detalles. Si los necesitamos, podremos usar adaptadores en las clavijas antiguas, aunque algo me hace pensar que esta transición va a ser muy rápida. Sin duda, creo que estamos ante un avance muy interesante, que en los próximos meses irá llegando al mercado. Esperemos que los cables y los conectores sean todo lo resistentes que parecen, y que nos olvidemos de aparatos con montones de puertos distintos.
¿Qué opinas del tema? ¿Vale la pena el cambio, o no crees que USB Type-C aporte demasiado a la industria tecnológica?