El cine nos ha regalado millones de películas que, a su vez, han dado lugar a todo tipo de anécdotas. Después de tantas y tantas producciones, no es de extrañar que se hayan repetido muchas fórmulas a lo largo de su historia.
En definitiva, el cine está plagado de tópicos, situaciones o acciones que hemos visto habitualmente en la gran pantalla y que han acabado convirtiéndose en todo un clásico.
Hoy, repasamos los tópicos más comunes en la industria del cine. Estamos seguros de que si continuáis leyendo la mayoría os resultarán muy pero que muy familiares.
¿Taparse con sábanas después de una noche de amor?
La verdad es que esta es una de las situaciones más típicas de las películas, aunque también una de las más paradójicas. Los protagonistas utilizan las sábanas para taparse después de una noche de pasión pero… ¿por qué? ¿es que no se han visto desnudos antes?
Lo realmente curioso es que a veces ocurre incluso cuando están solos y no han pasado la noche con nadie. Los actores de Hollywood deben pensar que es de lo más glamuroso.
Los sistemas de ventilación de los edificios son el escondite ideal
Lo hemos visto cientos de veces: el protagonista se esconde en los sistemas de ventilación de un edificio. Han sido escenario de cientos de escenas y además con varios usos. En efecto, los personajes los han utilizado como escondite, como forma de espionaje e incluso para moverse de una habitación a otra sin dificultad.
Siempre perfectos
De todos los tópicos que conocemos, este que el que más suele frustrarnos. ¿Por qué los actores y actrices siempre están tan perfectos? Se enfrentan a infinitas aventuras y terminan todas las escenas impecables. Pelo arreglado, maquillaje perfectamente conservado y ni un solo defecto, ¿cómo es posible?
¡Son ciudadanos americanos!
Los estadounidenses detenidos en otros países siempre se lo recuerdan a los agentes de policía: “¡Soy ciudadano americano!”. No deja de resultar curioso, pues a día de hoy haber nacido en América no otorga ninguna impunidad. Si la policía quiere saber la nacionalidad de un detenido, solo tiene que recurrir a su pasaporte.
Cuelgan el teléfono sin despedirse
¿Cuántas veces hemos pensado en lo antipáticos que son los personajes de las películas al verlos colgar sin despedirse? No sabemos el motivo, aunque quizás sea porque los guionistas no quieren perder el tiempo con una frase de despedida. Muchas producciones de intriga o acción terminan las conversaciones telefónicas sin un simple “adiós”, algo impensable en la vida real.
Puerta Abierta
En el mundo del cine se producen muchos absurdos, pero probablemente este sea uno de los más disparatados. Las casas siempre están abiertas, no importa el momento, porque girar el pomo bastará para entrar tranquilamente en una vivienda. ¿Dónde están las llaves? ¿Por qué no las utilizan?
Si tienes que pagar un taxi
Posiblemente no hayáis reparado en este detalle, pero es uno de los más curiosos en las películas. Cuando el protagonista coge un taxi jamás busca un billete en la cartera, basta con meter la mano en el bolsillo y sacar lo que tengamos… casualmente siempre coincidirá con el importe exacto.
La tele siempre oportuna
Cuando un personaje está triste o decaído enchufa la televisión en busca de un poco de entretenimiento. Lo gracioso es que cualquier canal está emitiendo algo relacionado directamente con él o con algo que le ocurre.
¡A casa!
Cuando un profesor está dando clase y suena el timbre, acaba precipitadamente con los alumnos ya levantados y recogiendo sus cosas. No importa si la explicación no ha terminado, todos saldrán corriendo sin ninguna consideración.
En la vida real, pocos son los valientes que abandonan la case sin el consentimiento del profesor. Como ellos mismos dicen, ”la clase no termina hasta que lo diga yo”.
Ups, ¡el coche no arranca!
Si los zombies te persiguen o estás en una situación de vida o muerte no cojas tu coche, porque tardará una eternidad en arrancar. El protagonista girará la llave de contacto una y otra vez, pero no se pondrá en marcha hasta que los muertos vivientes estén justamente al lado.
