Los móviles se han convertido en un accesorio imprescindible en nuestro día a día. Son tan importantes para nosotros, que muchas personas no conciben salir de casi sin él e incluso no se pueden imaginar ir a otra habitación y dejarlo olvidado encima de una mesa. A veces esto es exagerar demasiado, pero la verdad es que no podemos negar que muchas personas no se atreverían a pasar un día entero sin su smartphone.
Tanta es la necesidad que tenemos, que las empresas han sabido adaptar sus maneras de promocionarse a ello. La publicidad móvil es un pilar muy importante de la industria, ya que aparte de saber llamar la atención de los consumidores, también se debe adaptar a los distintos formatos de smartphones y usuarios. Gracias a algoritmos las agencias se encargan de mostrar aquellos anuncios más adecuados para cada tipo de persona.
De momento, el crecimiento en la publicidad móvil es espectacular. Se prevé que durante 2016, la publicidad móvil alcance su etapa de madurez, lo que significa que ya no va a seguir creciendo tan rápido y las empresas deberán buscar otras maneras de ganar beneficio con ello. De momento hay una serie de tendencias que se prevé que la publicidad móvil adopte.
Es el fin de las cookies
Los usuarios de smartphones están constantemente cambiando entre las páginas web y las aplicaciones, pero con cada vez más compañías sacando su propia app para los teléfonos móviles, está claro que los usuarios van a moverse hacia ellas. Es bastante evidente que las cookies cada vez tendrán menos importancia, pero la verdad es que aún no hay ningún sustituto posible.
En la actualidad, los desarrolladores de aplicaciones cuentan con la información personal que los usuarios comparten en su perfil, y esto se transforma para crear una especie de identificación personal con los gustos de cada uno. Esto puede ser efectivo en algunos casos, pero en otros, puede parecer algo engorroso ya que se requiere iniciar sesión y que el usuario haya rellenado su información personal.
Existen empresas que se dedican a observar a los usuarios y a identificar desde que dispositivos y ubicaciones se encuentran. Este concepto es el que más importancia va a tener, ya que las personas utilizamos diferentes dispositivos para realizar un proceso, por lo que los modelos de publicidad para esta persona objetiva se van a volver más complejos.
Plataformas móviles independientes
Para seguir atrayendo la atención de los clientes, las empresas deben intentar encontrar formatos que se adapten a las características de los teléfonos móviles. El contenido dinámico en vídeos y aplicaciones interactivas son algunos ejemplos de experiencias en publicidad que van a venir. Ligado con el punto anterior, la publicidad también tendrá en cuenta si estamos utilizando uno o más dispositivos de manera simultánea.
La manera como los smartphones han revolucionado como consumimos Internet, también servirá para dar un paso adelante y diferenciarse de los sistemas de escritorio. Ya no vamos a ver publicidad en las páginas web, sino que el móvil servirá como una plataforma sola en la que tendremos anuncios de las diferentes compañías.
Contenidos de mayor calidad
Los sistemas de datos que conectan a los usuarios y a las agencias de publicidad están madurando, y mientras lo sigan haciendo va a ocurrir un cambio: los datos ya no solo se encuentran en la parte de la demanda (anunciantes), y se podrán ser utilizados también por la oferta (los usuarios). Gracias a esto, las agencias de publicidad podrán personalizar los anuncios y los anuncios se convertirán en contenido más relevante para el usuario final.
Gracias a esto, también se podrán mover los diferentes tipos de anuncios en las plataformas existentes, de manera que se romperá la barrera existente en la publicidad. Con ello las agencias y los anunciantes tendrán la posibilidad de alcanzar a los usuarios de manera directa.
Así pues, nos espera una larga lista de tendencias en el próximo año. Lo más importante es que la publicidad pasará a ser algo más de nuestras vidas, pero si las agencias consiguen crear buen contenido que pase un poco desapercibido, la verdad es que no nos sentiremos enfadados por el exceso de publicidad, sino que lo agradeceremos y se convertirá en algo habitual. Esperemos que las compañías sepan optimizar bien este contenido para no estar sufriendo por otras cosas como la batería de nuestro móvil.