Oculus Rift y survival horror, una relación con futuro

Año 1992. Año que fue más importante de lo que puede parecer en un principio para el sector del vídeojuego. Ese año, Infogrames publicó el mítico Alone in the Dark, el primer juego de una exitosa y larga saga que acabó sentando los cimientos sobre los que se edificarían los nuevos títulos del género, siendo el alumno más aventajado el de Capcom. Su nombre fue Resident Evil (en Occidente, ya que en Japón se usó Biohazard como título de la obra), y fue tal el éxito cosechado por la saga, que la compañía nipona surtió a los gamers de entregas cada poco tiempo, consiguiendo el mayor reconocimiento con la segunda parte ambientada en la ya mítica comisaria de Racoon City.

Intentad recordar las sensaciones que tuvisteis a los mandos de Claire Redfield, Jill Valentine o Leon S. Keneddy, y extrapolarlas al día de hoy. ¿Qué resultado os da? Seguro que muchos aún recordáis el remake del primer Resident Evil que salió primero para Gamecube, y que posteriormente se reeditó para Nintendo Wii. ¿Acaso no os gustaría algo así con su segunda entrega? Pues aun os pido algo más. ¿Y si saliese ese supuesto remake de Resident Evil 2, usando la realidad virtual como nuevo método de inmersión? Estoy seguro que muchos al leer estas lineas os estaréis relamiendo y pensando que algo así sería impresionante. Pues bien, el hipotético caso del remake de RE 2 lo dejaremos aparcado, debido a que Capcom no está por la labor, pero de algo sí que tenemos que estar contentos, y es del nacimiento de la realidad virtual (en mayúsculas, debido a que lo de Virtual Boy fue algo desastroso) gracias a Oculus Rift, y quién sabe, del renacimiento de los juegos de terror.

¿Oculus qué? Bien, no os vayáis a asustar. Os explicaré de lo que se trata. Imaginaos unas gafas algo más aparatosas de lo normal (bastante más debido a que su peso ronda los 400 gramos) con las que quedáis completamente aislados de lo que os rodea. En su interior, encontraréis una pantalla LCD de 7 pulgadas que nos transportará a una nueva dimensión de juego, y si nos referimos al género del terror, probablemente a nuevas sensaciones que nunca habremos vivido jugando anteriormente a los Resident Evil o Silent Hill de turno.

Bien, ¿cómo os sabe el resultado? Pues quizás esta realidad la tendremos pronto en el mercado. No me refiero a que Konami y Capcom vayan a usar esta tecnología para sus nuevas obras, pero sí que hay títulos como Alone in the Rift que hacen uso de ella con muy buen resultado, demostrando a todo el mundo que la realidad virtual puede ser la receta que le faltaba al género del survival horror para revitalizarse.