Desde siempre Apple ha sido considerada una marca muy cara, que vendía intangibles como un diseño atractivo o el prestigio de la compañía. No quiero decir que sus productos no sean, en ocasiones, muy interesantes. Pero siempre cuestan más que los de sus competidores. Cuando se reveló el iPad mini con pantalla Retina me pareció un concepto muy coherente, porque dejaba de lado las especificaciones de bajo coste de su antecesor, y ofrecía la experiencia lujosa a la que nos tiene acostumbrados la multinacional de la manzana. Eso sí, el precio de este dispositivo asciende a unos exorbitantes 389 euros. ¿Demasiado caro?
Pues parecía difícil de saber, porque no existía ningún producto hasta el momento que encajase exactamente en su gama. Esto ha cambiado con la aparición de la Samsung Galaxy TabPRO 8.4. Las pantallas son similares (8,4 pulgadas y resolución 2.560 x 1.600 en el aparato coreano, 7,9 pulgadas y 2.048 x 1.536 píxeles en su competidor), los procesadores comparables (aunque Apple usa un modelo propio) y ambos dispositivos ofrecen acabados de lujo, aunque muy diferentes. Las dos tabletas muestran un rendimiento excelente, si bien la de Samsung no destaca en la duración de la batería como su rival. En cualquier caso, veo claro que estamos ante experiencias premium en toda regla.
Y aquí nos encontramos con que el precio oficial del aparato de los coreanos se va hasta los 399 euros, y que normalmente se encuentra sobre los 370 euros. Resulta sorprendente que, cuando aparece un verdadero rival para el iPad mini con pantalla Retina, su precio sea casi el mismo. Existen dos posibilidades: o bien un producto de calidad se ve obligado a venderse por una cifra mayor, o Samsung ha decidido que no quiere que su alternativa más lujosa se enfrente en precio contra su rival más directo. En cualquier caso, la conclusión que sacamos de este caso es que Android puede volverse tan caro como Apple en igualdad de condiciones.
Sin duda, el Samsung Galaxy TabPRO 8.4 irá rebajándose, algo que no pasará en el caso de su competidor hasta que aparezca un sucesor. Y veo evidente que pronto se lanzarán productos de otras marcas con prestaciones técnicas similares. Pero este ejemplo ha demostrado que Apple no siempre resulta tan cara, y que a veces otros fabricantes se ponen a su nivel cuando quieren igualarla al ser pioneros en nuevas características y acabados muy cuidados. Yo, desde luego, me lo pensaré un poco en el futuro antes de decir que la compañía de la manzana mordida ofrece una mala relación calidad precio.
¿Qué opinas del tema? ¿El tablet de Samsung tiene ese coste porque lo vale, o porque no existe todavía competencia suficiente en ese nicho de mercado?
