En una sociedad en la que los videojuegos ganan importancia día a día, muchos aficionados a la cultura gamer nos preguntamos cuáles son los orígenes de esta industria. Aunque en la actualidad disfrutamos de geniales juegos cada vez más realistas y que nos ofrecen una mejor experiencia, no siempre fue así.
Los controles y joysticks son uno de los elementos fundamentales en esta historia y, evidentemente, también han evolucionado con el paso de los años. Los sensores de movimiento, la tecnología inalámbrica o los giroscopios son solo algunas de las novedades que han llegado a nuestras casas en los últimos tiempos.
Lo que hoy concebimos como algo normal, un día fue algo inimaginable en la mente de muchos jugadores. En este post repasamos la evolución de los joysticks, estamos seguros de que lo que vamos a mostraros no os dejará indiferentes.
Las perillas y los botones
Cuando la industria del videojuego comenzó a desarrollarse, las perillas y botones se convirtieron en una auténtica revolución. Llegaron de la mano del físico William Highinbotham, creador de Tennis for two, el primer juego de la historia. Con la perilla, los jugadores controlaban el movimiento de la pelota, y con el botón decidían cuando golpearla.
No obstante, la primera consola casera en aterrizar en el mercado fue el Magnavox Odyssey, en 1972. Sus controles tenían dos perillas para controlar el movimiento, una para el horizontal y una para el vertical. Aunque era similar al sistema de Tennis for Two, este sistema fue empleado ya en las “tragaperras” un año antes.
La palanca
La palanca cambió radicalmente la forma de concebir los controles. Tanto es así que ninguna compañía de videojuegos escapó a su influencia tras su aparición. El primer juego que las utilizó fue Galaxy Game en 1971. El 1976 fueron utilizadas en el Fairchild Channel F. y poco después Atari VCS las popularizó a finales de los 70.
Ante la falta de precisión de su mecanismo, se volvieron a introducir las perillas, aunque agregándoles un panel de botones digitales. Cada tecla tenía asignado un número que, a su vez, correspondía a una acción determinada dentro del juego.
La llegada de los controladores
A principios de los 80, los controles continuaban siendo incómodos y confusos, pero la situación se revirtió con la llegada en 1985 de Nintendo y la posterior creación del legendario Nintendo Enterteinment System, más conocido como NES. En control de esa revolucionaria consola era sencillo a la par que divertido: contaba con una cruz direccional en sustitución de la palanca, un botón para seleccionar y dos botones, A y B, para ejecutar acciones.
El joystick para PC
Mientras que los controles de consolas siguieron la misma línea establecida por Nintendo, los juegos de Arcade y ordenador se vieron obligados a tomar otro rumbo. En el caso de las máquinas de videojuegos, continuaron con el modelo de palanca y añadieron progresivamente más botones. Los de carreras comenzaron a introducir volantes con aceleradores y frenos, y los de disparos optaron por pistolas de luz.
La gran novedad, sin embargo, llegó con los simuladores de aviación, que empleaban palancas muy parecidas a las de los cazas aéreos. Este modelo se popularizó y acabó utilizándose como joystick de PC. Su forma y diseño variaron, pero la esencia permaneció intacta.
A partir de los 90…
Con la llegada de los 90, las consolas recibieron importantes cambios en lo que a controles se refiere. Sony innovó su diseño y se atrevió a reintroducir los sticks, que podían controlarse con los mismos dedos y que permitían realizar movimientos más precisos y fluidos.
Además, la popular compañía agregó dos botones extra, L y R. Mientras tanto, Nintendo quiso unirse a la tendencia de moda y añadió el stick en sus controles. En este mismo contexto, se añadió la vibración que se mantiene hasta la fecha.
La sexta generación trajo consigo una mejora del modelo y Nintendo al fin dio el paso de crear el primer control inalámbrico, que funcionaba gracias a su batería. Poco después, ya en la séptima generación, Microsoft y Sony apostaron por la potencia y el aspecto de sus consolas dejando de lado la forma de juego.
Nintendo, en cambio, diseñó una nueva consola totalmente revolucionaria. Su innovación con Wii esperaba buenos resultados, pero sin embargo no pudo competir con el éxito comercial de sus contrincantes. Quizás fue este punto innovador el que obligó a la competencia a mejorar en otros aspectos.
Al mismo tiempo, Microsoft optó por otro camino creando Kinect, un sistema con el que pretendía explorar la tecnología del reconocimiento de movimiento. Kinect es capaz de reconocer el movimiento y, a pesar de que contó con una gran aceptación, quizás no fue lo que Xbox One estaba buscando.
Por el momento, el universo de los controles se mantiene sin grandes cambios en el horizonte, aunque no sabemos cuánto tiempo continuará vigente este modelo. Nintendo podría dar la sorpresa con el NX y la realidad virtual promete aterrizar en esta industria con mucha fuerza.