Premio Planeta

Este año no se estudiará en las ciberescuelas del futuro, nadie escribió algo comparable a "El Quijote". O eso creo. Puede que dentro de 50 años mi hijo lea este artículo y se avergüence de su padre. Era una mezcla entre cucaracha y topo, dirá. De todas formas, en Xombit vamos a rescatar lo más destacable del mundillo literario. No esperes que me saque un conejo de la chistera, es una superficial recopilación de fin de año que podrías leer escuchando "El Tamborilero" de Raphael o acurrucado en el sofá, mientras tu pareja las goza viendo el nuevo anuncio de Freixenet en su iPad.

Cuentan las malas lenguas que el ganador ya sabe antes de la cena en el Palau de Congressos de Catalunya, que su novela es la elegida. Y que tiene que disimular el subidón hasta que se pronuncia su nombre. Una responsabilidad que no se puede regar con vino. La controversia es un ingrediente más, en esta ensalada de billetes verdes. Lo único indiscutible es el nombre del campeón: Lorenzo Silva. Con su novela "La marca del meridiano". Un escritor que a partir de ahora podrá cruzar la puerta de su banco por una alfombra roja. Bueno, tampoco era un desconocido...

Hay búsquedas que son inexorables. El grito de una moribunda desata una de ellas, una que irá mostrando los hilos que unen a tres hermanas que representan los diversos rostros de lo femenino en la España de finales del XIX. Finalista del Premio Planeta en 2011, Inma Chacón nos regala un emocionante relato de misterio donde el pasado juega un papel primordial. ¿Queréis saber de qué va? ¿Estáis buscando un libro para las vacaciones? Pues aquí os dejamos una recomendación.

Terenci Moix ha sido uno de los autores más leídos de la literatura española tras la publicación de “No digas que fue un sueño”. Con esta novela con la que se alzó con el Premio Planeta en 1986 y que vendió más de un millón de ejemplares Terenci Moix alcanzó una fama y repercusión mediática que le acompañaron hasta el final de sus días. La reinterpretación de una historia de amor que sucedió hace más de dos mil años.

En 1991 Antonio Muñoz Molina obtenía el Premio Planeta por su novela "El jinete polaco", una obra de considerable complejidad estructural que supuso la consagración definitiva de su autor como uno de los grandes novelistas en lengua castellana del siglo XX.

Anoche se hacía entrega de uno de los premios más importantes y prestigiosos de la literatura castellana: el premio Planeta de novela. El galardón fue a parar a manos del escritor madrileño Javier Moro, en una edición (la número 60) sin grandes favoritos para alzarse con el premio.