Recientemente, Microsoft compró la división de móviles de Nokia, principal artífice del crecimiento de Windows Phone. Y es que Samsung ha apoyado muy tímidamente la plataforma, al igual que HTC. Por suerte, hubo nuevo fichajes, como Huawei, pero empresas como LG se bajaron del tren, y otras como Sony nunca se subieron. La multinacional de Steve Ballmer desea seguir contando con socios en el mundo de los smartphones, a pesar de que ahora también fabricará su propio hardware, pero muchos temores apuntan a que las compañías no van a estar interesadas después de que comprara Nokia. Así que parece que se está intentando forzar la situación.
Según apuntan las fuentes de Bloomberg, la compañía de Redmond se encuentra intentando tentar a HTC con una propuesta muy curiosa: quiere que incluya Windows Phone en alguno de sus móviles con Android, y plantea reducir o incluso eliminar el coste de la licencia del sistema operativo. Por ahora, se tratan de simples conversaciones, y no se ha concretado la viabilidad técnica (que no veo muy complicada) ni ha trascendido si el usuario elegiría el software que querría usar en cada momento, o tendría que decidirse por uno para siempre cuando encendiera el terminal por primera vez.
La idea no resulta insólita, el ordenador Samsung ATIV Q combinará Windows 8 con Android para ofrecer una experiencia más completa. Considerando la mala situación económica de HTC, tal vez se trate de una buena idea empezar a valorar estrategias innovadoras. Yo, desde luego, como consumidor valoraría positivamente contar con ambos sistemas operativos en un mismo teléfono (algo que debería pasar en las tablets) sobre todo si eso no implica un aumento apreciable en el coste del dispositivo. Veremos qué resulta de todo este tema, pero lo que veo claro es que Microsoft considera muy importante no perder a sus socios de Windows Phone.
¿Qué opinas del tema? ¿Te comprarías un HTC con dos sistemas operativos, o tienes muy claro cuál se trata de tu preferido?