¿Eres un amante de los felinos, pero no puedes tener uno en casa? Ya sabemos que son traviesos, bastante rebeldes y dan trabajo, así que existe una opción: ir a jugar con ellos a una cafetería. El primer local de este tipo abrió en 1998 en Taiwan, y el concepto pronto alcanzó cierta popularidad en Japón (allí lo especial resulta normal). En capitales como Viena o París ya existen cafés de gatos, y ahora también en Madrid. Se trata de una iniciativa de una organización dedicada a la protección de estos animales, por lo que podemos tener la seguridad de que reciben un buen trato.
De hecho, no estamos ante una cafetería en la que entremos y nos sentemos, sino que primero nos explicarán las normas, entre las que destacan no molestar a los animales. En realidad, el local parece más un “parque de atracciones felino” que otra cosa. Podremos jugar con los mininos (si nos hacen caso) y tomar un refresco. Además, hay una tienda en la que se venden todo tipo de productos para nuestras mascotas. El precio no resulta demasiado económico (6 euros la hora, aunque se venden bonos), pero tampoco es un sector en el que exista competencia.
A pesar de que los gatos son la estrella del local, existe la posibilidad de adoptarlos, aunque la asociación encargada no permite que se vayan con cualquiera, y comprueba que se encuentren en buenas manos. Si no podemos llevarnos un nuevo amigo a casa, tenemos la opción de apadrinarlo por una pequeña cantidad mensual. El establecimiento se encuentra cerca de la estación de Atocha, así que a los madrileños les resultará fácil acercarse a tomar algo en compañía de estas agradables criaturas. Una idea interesante, que esperamos que se ponga de moda y llegue a más ciudades en los próximos meses.
¿Qué opinas de La Gatoteca? ¿Te parece un concepto interesante, o no crees que los gatos vivan cómodos entre tantos extraños?